Cada 20 de marzo la ONU celebra el Día Internacional de la Felicidad como reconocimiento del importante papel que esta desempeña en la vida de las personas de todo el mundo. Hoy te contamos cómo tu alimentación puede ayudarte a celebrar la felicidad todos los días. ¡No te lo pierdas!

Dieta y felicidad

La felicidad es un estado de ánimo que nos hace sentir plenamente satisfechos. Aunque hay muchas formas de ser feliz, suelen ser las pequeñas cosas las que nos ayudan a sentirnos contentos en el día a día: familia, amigos, experiencias, logros… y, entre ellos, la alimentación juega un papel más importante de lo que creemos.

Numerosos estudios han demostrado la relación directa entre alimentación y estado de ánimo. Además de ayudarnos a cuidar nuestra salud, llevar una correcta alimentación también influye directamente en la forma en que afrontamos nuestro día a día y en las sensaciones que experimentamos. Ciertos alimentos pueden influir en nuestra actividad cerebral y mejorar la salud mental y emocional, ofreciéndonos una sensación de bienestar, relajación y placer.

Cuestión de química

Hay numerosos alimentos que por sus propiedades contribuyen a mejorar nuestra felicidad y que nos aportan la energía que necesitamos para afrontar el día a día.

Triptófano

El triptófano es un aminoácido presente en muchos alimentos que ayuda a nuestro cerebro a liberar serotonina, una hormona encargada de regular el estado de ánimo y generar sensación de bienestar en nuestro organismo. Por algo es conocida como la hormona de la felicidad. Si los niveles de triptófano en el organismo son bajos, los niveles de serotonina en el cerebro caen, lo que puede producir un bajo estado de ánimo. Por eso es importante consumir alimentos ricos en triptófano como plátanos, leche y productos lácteos, nueces, cereales integrales o chocolate puro.

Glucosa

Nuestro cerebro necesita determinados nutrientes para funcionar correctamente y la glucosa es lo que podríamos llamar “el combustible esencial del cerebro”. Por eso es importante asegurarnos de que nuestro cerebro tiene un suministro constante de glucosa, que también ayudará en la producción de serotonina. Para ello debemos consumir alimentos ricos en hidratos de carbono de absorción lenta o almidón, como patatas, arroz o cereales integrales que contribuirán a regular nuestro estado de ánimo.

Omega-3

Los ácidos grasos omega-3, también conocidos como ácidos grasos esenciales, se encuentran principalmente en los pescados. Varios estudios han demostrado que existe una relación entre el consumo de pescado y el estado de ánimo, ya que contar con bajos niveles de omega-3 puede provocar un empeoramiento del estado de ánimo. El pescado azul tiene los niveles más altos de aceites omega-3, así que incluye en tu dieta salmón, caballa, sardinas o atún en conserva. También puedes consumir omega-3 a través de las nueces, por ejemplo.

Tener una buena salud es clave para ser feliz. Por eso, además de consumir alimentos que estimulen la sensación de placer y satisfacción, es fundamental llevar una dieta equilibrada y variada que nos ayude a mantenernos sanos y a proteger nuestro organismo. Porque cuidar tu dieta sirve para mucho más que para verte en forma y saludable, también es una de las claves de tu bienestar psicológico.