
Una tabla de quesos es la opción ideal para compartir con amigos o en familia. Es versátil, visual y siempre deliciosa. Pero si alguna vez te has preguntado cómo preparar una tabla de quesos que conquiste todos los paladares, aquí te damos las claves: desde la selección de los quesos hasta la presentación, pasando por combinaciones irresistibles con embutidos y otros acompañamientos.
¿Cómo preparar una tabla de quesos?
Lo primero que debes tener claro a la hora de cómo preparar una tabla de quesos es la variedad. Elige quesos de diferentes intensidades, leches y texturas. Una buena tabla suele tener al menos cuatro tipos distintos, empezando por los más suaves y terminando por los más potentes.
Los quesos frescos de Central Lechera Asturiana son una base perfecta. Su sabor suave y textura cremosa funcionan muy bien al inicio del recorrido de sabores. Puedes combinarlos con otros quesos más curados o intensos para aportar contraste.
Para continuar con tu tabla de quesos perfecta puedes utilizar quesos más intensos y con sabores gradualmente más fuertes. Nos gustaría recomendar variedades de quesos de Asturias. Esta región del norte de España es conocida por su gran variedad de quesos distintos y su altísima densidad de queserías, tanto es así que es llamada la mayor mancha quesera de Europa. Las variedades más conocidas son:
- Queso Cabrales: el queso asturiano por excelencia tiene textura untuosa, veteados azules, olor intenso y penetrante y sabor fuerte y persistente.
- Queso Afuega’l Pitu: de color anaranjado, aroma láctico suave y sabor fuerte y picante.
- Queso Gamoneu: de color blanco o amarillento, aroma intenso y ligeramente ahumado y sabor potente y complejo.
Alternar entre estas opciones es la clave para preparar tablas de quesos atractivas y equilibradas.
¿Y cómo hacer una tabla de quesos y embutidos?
Si quieres saber cómo hacer una tabla de quesos y embutidos, debes buscar un equilibrio entre los sabores intensos y los más suaves. Los embutidos ibéricos, como el jamón, el lomo o el chorizo, combinan de maravilla con quesos curados y azules.
Una buena idea es acompañar un Queso Cabrales Cueva del Molín, potente y cremoso, con lonchas de jamón ibérico y pan crujiente. También puedes combinar un Queso fresco de Burgos, de sabor delicado, con fuet o salchichón.
El truco para saber cómo hacer una tabla de quesos y embutidos está en presentar los ingredientes de forma atractiva, sin apelmazarlos, y con elementos que equilibren la grasa, como uvas, pepinillos o mermeladas.
¿Qué quesos poner en una tabla de quesos?
No siempre es fácil decidir qué quesos poner en una tabla de quesos, pero una regla básica es apostar por contrastes: mezcla de texturas (frescos, semicurados, curados, azules) y sabores (suaves, intensos, salados, dulces).
Una opción ideal puede ser:
- Queso fresco Central Lechera Asturiana
- Burrata al Pesto Central Lechera Asturiana para darle un toque distinto
- Queso Afuega’l Pitu
- Queso Gamoneu
- Queso Cabrales Cueva del Molín
Así, cubres una amplia gama de gustos para todo tipo de comensales.
Ideas para decorar tu tabla de quesos
Una tabla entra por los ojos, y las buenas ideas de tabla de quesos también pasan por la presentación. Utiliza una tabla de madera, pizarra o mármol, y coloca los quesos de fuera hacia dentro, ordenados de menor a mayor intensidad.
Decora con frutas como uvas, higos o rodajas de manzana, que aportan frescura y color. Añade frutos secos (nueces, almendras), mermeladas, miel, aceitunas y panecillos variados.
Pequeños detalles como unas ramitas de romero o unos pétalos comestibles pueden marcar la diferencia. Este tipo de ideas de tabla de quesos transforman tu tabla en un centro de mesa que llama la atención.
Consejos para hacer una tabla de quesos perfecta
Saber cómo presentar los quesos es casi tan importante como elegirlos. Saca los quesos del frigorífico al menos media hora antes para que estén a temperatura ambiente. Córtalos según su forma y textura: en cuñas, bastones, dados o lascas, y utiliza un cuchillo diferente para cada uno.
Etiquétalos si puedes, y acompaña la tabla con servilletas, platos pequeños y cubiertos para untar o cortar si hace falta.
No olvides jugar con los colores y formas: mezcla quesos de corteza blanca, azul, amarillos intensos o con vetas. Y recuerda que el toque final es el maridaje: vinos, cervezas artesanas, sidra o incluso una limonada casera pueden realzar los sabores.Con estos trucos y la mejor selección de quesos de Central Lechera Asturiana, dominarás el arte de hacer una tabla de quesos que triunfe en cualquier evento. Saber cómo preparar una tabla de quesos o cómo hacer una tabla de quesos y embutidos nunca fue tan sencillo… ni tan delicioso.